Primeros Diálogos de Jesús con San Pedro Apóstol, Padre de los Apóstoles
Querido hijo, Pedro, Piedra sobre la Cual Yo he edificado, sigo edificando y edificaré por siempre Mi Iglesia, Mi Templo, Mi Cuerpo Místico, Mis Corderos, Mis
Querido hijo, Pedro, Piedra sobre la Cual Yo he edificado, sigo edificando y edificaré por siempre Mi Iglesia, Mi Templo, Mi Cuerpo Místico, Mis Corderos, Mis
Querido hijo, Pedro, Piedra Viva sobre la Cual Yo he edificado, sigo edificando y edificaré por siempre Mi Iglesia, Mi Templo Espiritual, Mi Cuerpo Místico, Mis
Querido hijo, Bienaventurado Pedro, Piedra Viva, Perenne, Gloriosa, Fundamental, espíritu humano creado por Mí y por Mi Padre y por Nuestro Espíritu Santo, que con tu
Hijo y Vicario Mío, Pedro Apóstol, Padre de todos los Papas, Padre de todos los Obispos, de todos Mis Ministros, de Todos Mis hijos e hijas.
Hijo y Vicario Fundamental Mío, Pedro o Piedra creada por Mí y por Mi Padre y por Nuestro Espíritu Santo, Que Somos El Único Dios Vivo
Amado Vicario Fundamental Mío, Pedro Apóstol, Padre de todos los Papas, Padre de todos los Obispos, de todos Mis Ministros, de Todos Mis hijos e hijas.
Mi Amado Pedro, Piedra Romana Fundamental de Mi Iglesia Una y Única, Santa, Católica, Apostólica. Yo te traslado, te llevo a Toda Mi Iglesia. Te traslado
Mi Amado Pedro, Tú fuiste crucificado en Roma, corporalmente. Los que te crucificaron en la Cruz Material eran paganos, no Me conocían a Mí, no sabían
Mi Amado Pedro, Tú fuiste crucificado en Roma, corporalmente, y en Roma está tu Sagrado Sepulcro. Yo tomo de Tu Sagrado Sepulcro la Piedra Viva que
Mi Amado Pedro, Sepultado está en Roma tu Sagrado Cuerpo. Tu Cuerpo está bendecido. Tu Cuerpo está amparado por Mí. Tu Cuerpo está cargado de Divinas
Mi Amado Pedro: Afectado estás por los acontecimientos que suceden contra Mí. A Ti Te produce gran alegría el ver cómo muchas almas Me reciben con
Mi Amado Pedro: Tú confías en Mi Corazón. Tú sabes que Yo Soy la Victoria. A Mí, nadie puede vencerMe. Tengo Paciencia, doy tiempo por si
Mi Amado Pedro: La Seguridad Mía Es Infinita. La Seguridad Mía Es Eterna. Yo Soy La Infinita Seguridad en la Unidad de Mi Padre y de
Mi Amado Pedro: Yo Soy El Que Soy, en la Infinita y Eterna Unidad de Mi Padre y de Nuestro Espíritu Santo, El Padre Tuyo y
Mi Amado Pedro: Muchos de Mis Conventos de Clausura están siendo cerrados. Esto Me produce un grandísimo Dolor, y, sobre todo, las equivocaciones en la Vida
Mi Amado Pedro: Tú lo consultas todo Conmigo. Vas a Mi Paso. Ni Te adelantas ni Te atrasas. No eres Tú, Soy Yo en Ti. Así
Mi Amado Pedro Apóstol, Padre de los Apóstoles: Tú, para Mí, estás muy especialmente Vivo y Operante, como Piedra Mía y de Mi Padre y de
Mi Amado Pedro Apóstol, Padre de los Apóstoles, Padre de todos los Papas. Si los Papas, Sucesores Tuyos, Te obedecen, Te imitan, Te consultan, pues Tú
Mi Amado Pedro: TÚ ESTÁS VIENDO, en Nuestra Divina Esencia, cuán extraviadas andan multitudes en Mis Templos. Hablan entre sí, como si Yo no estuviera Tal
Mi Amado Pedro: El DIÁLOGO que Yo y Mi Padre y Nuestro Espíritu Santo queremos es el que se realiza en Nos, Que Somos la Infinita
Mi Amado Pedro: Tú eres la Viva Piedra sobre la Cual voy añadiendo las demás piedras vivas todas que se dejan tomar por Mí y por
Mi Amado Pedro: Tú, Que Reinas Conmigo en el Cielo como Cabeza Visible Principal de Toda Mi Única y Católica Iglesia, ves, con la Visión Sobrenatural
Mi Amado Pedro: Visita a Tus Sucesores. Muéstrales algo de tu Gloria, de esa Gloria que Yo reservo a los Sucesores Tuyos que se dejan edificar
Mi Amado Pedro: Tienes presente Mi Vida. Tienes presente, contemplando cara a cara Nuestro Divino Rostro, cómo ensalzo la Fe de la mujer cananea, diciéndole: «Oh