Tú, Universal Romano Pedro de Jesucristo Nazareno
Amadísimo hijo Nuestro, San Pedro Apóstol, Padre de los Apóstoles:
Tú eres Universal, o sea, Católico: Abarcas todas las edades, pues Te encomendamos Todos Nuestros Corderos, Todas Nuestras Ovejas, para que a todo Nuestro Universal o Católico Rebaño de Almas Lo apacientes, Lo alimentes con Nuestra Palabra, con Nuestros Sacramentos, con Nuestra Santísima Oblación o Sacrificio Perpetuo, con Toda Nuestra Universal, Única e Inagotable Revelación.
Tú eres Romana Piedra, pues Te hemos hecho para siempre Máximo Obispo de Nuestra Roma y de Nuestra Eterna, la Roma que no ha de ser destruída, o sea, Nuestra Jerusalén Celestial.
Eres Máximo Pontífice, pues Mi Padre y Yo y Nuestro Espíritu Santo Te hemos constituido Piedra Primera y Fundamental sobre la Cual hemos querido edificar a toda Nuestra Católica y Única Iglesia.
Somos la Trinidad Única, Redentora, Perdonadora, Justificadora, Anunciadora.
Amadísimo hijo Nuestro, San Pedro Apóstol, Padre de los Apóstoles:
Tú eres Universal, o sea, Católico: abarcas todas las edades, y, por eso, también los Últimos Tiempos.
Desde Nos, junto con Tus Santos Sucesores, riges siempre a Nuestra Única Iglesia Peregrina, aún cuando no haya todavía Sucesor Tuyo en la Tierra, o, incluso, cuando en la Tierra no hubiese Sucesor Tuyo Fiel a Nos.
Ya que Te encomendamos Todos Nuestros Corderos u Obispos, Presbíteros, Diáconos, Clérigos; Todas Nuestras Ovejas, Nuestras Almas especialmente Consagradas y Nuestras Almas que han de ser Testigos Nuestras en las tareas temporales, llegue a Todas Nuestras Almas Tu Pastoreo:
Apacienta a Tus Sucesores, los Papas que aún puedan salvarse.
Apacienta a Tus Hijos los Obispos, Apóstoles Nuestros.
Apacienta a Tus Hijos los Presbíteros Nuestros.
Apacienta a Tus Hijos los Diáconos Nuestros.
Apacienta a Tus Hijos los Clérigos Nuestros.
Apacienta a Tus Hijos los Consagrados Nuestros.
Apacienta a Tus Hijas las Consagradas Nuestras.
Apacienta a Tus Hijos los Fieles Laicos Nuestros.
Apacienta a Tus Hijas las Fieles Laicas Nuestras.
Eres Máximo Pontífice, tienes la Máxima Plenitud de Nuestro Sacramento del Orden Sacerdotal, pues Mi Padre y Yo y Nuestro Espíritu Santo Te hemos constituido Máximo Pontífice, directamente, y no a través de instrumento humano alguno.
Somos la Trinidad Única, Redentora, Perdonadora, Justificadora, Anunciadora, no hay otra trinidad viva, verdadera, Infinita, eterna; no hay otro dios.
Somos El Único Dios Vivo y Verdadero: Padre, Hijo Jesucristo y Espíritu Santo.
Pedro: Predica Nuestro Divino Nombre.
Pedro: Transmite Nuestro Divino Nombre.
Pedro, Universal Piedra, Pastor Universal: Predica, Vive y Celebra continua y eternamente Nuestros Divinos Misterios.
AMÉN.